No sabes quién eres porque, según Sergi Torres, no te conoces a ti mismo.

No nos conocemos, no sabemos quiénes somos. El ser humano no se da cuenda de que no es, lo que piensa que es y esto nos hace sufrir.

Creemos saber quiénes somos, generamos una idea, imágenes mentales de nosotros mismos, que no está basada en el autoconocimiento. detrás de esas imágenes, está la verdad.

No prestamos atención, so sabemos observar y ser consciente de nuestras imágenes mentales. Por lo tanto, no podemos no hacer caso a dichas imágenes mentales.

Si tú eres lo que yo pienso que tú eres, entonces cierro cualquier posibilidad a conocerte, porque creo que eres lo que yo pienso que eres. Esto nos limita y nos impide descubrir a nadie. Las personas no son las imágenes que generamos de ellas.

Encontrar que las personas no son como nosotros, desde nuestra profunda ignorancia hemos generado, nos resulta frustrante y limitante y volcamos nuestra frustración en el otro.

Este mecanismo nos hace sufrir, porque vivimos queriendo ser quienes lo que pensamos que somos.

Es importante entender y darse cuenta de lo mas elemental: Lo que yo pienso de la cosa, no puede ser la cosa. A partir de la comprensión de este concepto, las cosas se ven muy diferentes.

Lo que yo pienso de la cosa, no puede ser la cosa

Si crees que eres lo que piensas que eres, nunca podrás descubrir el potencial que tienes.

Como no sabemos quienes somos, como no nos conocemos, buscamos patrones de identidad. Buscamos un “paquete de creencias”, valores e ideas. Una religión, un partido político o una nacionalidad, no da esa necesidad de identidad.

El ego necesita identificarse y por lo tanto compararse y competir en que religión, o nacionalidad es mejor que otra. Esto, si lo piensas, no tiene absolutamente ningún sentido.

Nadie es mejor o peor, todos somos seres humanos. Somos una única especie que convive con otros seres vivos en el planeta, sin embargo, el ego nos lleva a compararnos, a separarnos y a enfrentarnos.

Somos universo.

Somos universo. Al igual que una galaxia es universo en forma de galaxia o un planeta es universo en forma de planeta, el ser humano es universo en forma humana.

Vemos el mundo en base a unas creencias limitadas y limitadas, lo que nos hace sufrir. No podemos llegar a esta conclusión si no nos conocemos a nosotros mismo.

El autoconocimiento debería ser lo primero en la vida del ser humano, sin autoconocimiento, no podemos ser conscientes de nosotros mismo ni de nuestro entorno.

El primer paso para el autoconocimiento es conocer tu ego, para observarlo, entenderlo y abrazarlo.

Para observar el ego, debemos tener la capacidad de atención y observación, de ahí que la meditación y el entrenamiento de la mente y de la atención sean claves en el proceso.

No te creas nada de lo que acabas de leer, experimenta y piensa por ti mismo.

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